jueves, 28 de junio de 2007

MUJERES DESEPERADAS A LO LARGO DE LA HISTORIA

EVA

Por motivos obvios, la bíblica Eva debe encabezar la lista de las Mujeres desesperadas a lo largo de la historia: es la responsable del pecado original.

En el libro Génesis, Eva logra que Adán y ella misma sean expulsados del jardín del Edén por comer el fruto prohibido de un determinado árbol. (Aunque esta fruta ha sido siempre considerada como una manzana, el libro Génesis no indica otra cosa que "una fruta". ¿Es posible que Eva y adán fueran expulsados del jardín por una naranja, una pera o un mango? No. Ninguna de ellas cruje como una manzana.)

Cuando se piensa en ello, realmente no sorprende que un alimento como este sirviera para sumir en la ruina a la humanidad. Dejando de lado el hecho de que la palabra "comida" aparece 311 veces en la Biblia del rey Jaime (sólo 124 veces la de fruta), es evidente que los productos alimenticios –es decir, que sirven para nutrirse, dan comodidad y placer- debían estar presentes en la mente de los primeros hombres y mujeres. Evidentemente, algunas cosas nunca cambian.

Todos conocemos la leyenda. Satanás, disfrazado de serpiente, induce a Eva a morder la fruta del Árbol del Conocimiento del Bien y del Mal. El resto es historia, en sentido literal. Eva dio un mordisco y convenció a Adán para que hiciera lo mismo. Fueron expulsados del paraíso y entraron en este mundo imperfecto que todos conocemos y queremos. Después de todo, no tendríamos Mujeres desesperadas si no hubiera ocurrido así.

Enfrentémonos a ello: todos podemos caer en la tentación. Siempre queremos aquello que no podemos tener. Quizás en esto reside nuestra desesperación. Ya sea una fruta, un fontanero apuesto o un ascenso en el trabajo, todo es motivo suficiente para llevarnos a cometer actos desesperados.

Eva fue solamente la primera en mostrarnos el camino.